El domingo 10 de Abril de 2016, tuvo lugar la Convivencia Anual que se viene celebrando en estos últimos años en la Basílica de la Virgen de las Angustias de Granada.
Fueron más de sesenta personas, pertenecientes a las distintas realidades que funcionan en la dinámica de la Basílica, las que han asistido a este encuentro. El tema propuesto para la convivencia ha sido: "Revisar a la luz de la Conversión Pastoral desde el ámbito de la misericordia de todo lo que hacemos", tema que implica un programa para cinco años.
Desde las diez de la mañana, varios miembros de la Hermandad de la Virgen de las Angustias iban dando la bienvenida a todas las personas, que iban llegando a la misma, entregándoles un distintivo de colores diferentes en el que cada uno ponía su nombre para ser fácilmente reconocido.
A las diez y media D. Blas inició la convivencia en el salón parroquial del Colegio y con su natural amabilidad, dio la bienvenida a todos los asistentes y a continuación se tuvo la oración comunitaria en la que todos participaron.
En la presidencia figuraban dos carteles relativos al Año Jubilar de la Misericordia, que está celebrando la Iglesia Católica.
D. Blas explicó varios puntos de un documento del Papa Francisco donde se desarrolla el tema propuesto para esta convivencia.
Sobre las doce de la mañana se formaron cinco grupos para sacar conclusiones y propuestas relativas al mismo y cada grupo nombró a un coordinador para recoger las aportaciones de los presentes y después exponerlos en la puesta en común que tuvo lugar sobre las trece horas antes de la comida de hermandad. En esta puesta en común se recogieron las aportaciones de los distintos grupos que realmente reflejaron la vida que se desarrolla en la Parroquia y las propuestas que se pueden poner en funcionamiento para mejorarla.
Sobre las dos y media de la tarde se tuvo la comida de fraternidad en la terraza cubierta de la Basílica, con los ricos alimentos, aportados por todos los asistentes a la convivencia.
A las cuatro y media se celebró la Eucaristía en el salón de actos, que ponía el broche de oro a esta jornada de convivencia parroquial. La Santa Misa fue presidida por D. Blas Gordo, que tuvo palabras alentadoras para todos los asistentes en el camino de nuestras vidas, siendo testigos vivientes del Señor Resucitado con alegría y sobre todo sinodalmente. Explicó cómo Jesús en el episodio de la pesca milagrosa se hace presente a los apóstoles en un momento de disgusto porque no habían pescado nada en toda la noche y cómo los apóstoles confían en las palabras de Jesús, produciéndose el milagro. Así está Jesús, siempre pendiente de nosotros y saliendo en nuestra ayuda siempre que confiemos en Él.
Las lecturas y peticiones fueron realizadas por miembros de la convivencia; los cantos fueron interpretados por todos los asistentes, resaltando las melodías de los miembros de las Comunidades Neocatecomunales, acompañadas por instrumentos de cuerda. Todo contribuyó a la piedad y recogimiento de esta Eucaristía.
Al terminar todos los asistentes cantaron la música de "Paso el río paso el puente" con letra compuesta por Antoñita Bonilla para la ocasión, cuyo estribillo decía así: "Qué a gusto estamos, todos reunidos en esta Comunidad, es Cristo resucitado el que nos une en su paz" La alegría y la satisfacción fueron el denominador común de esta alegre convivencia, que terminó sobre las seis de la tarde.
Crónica y Fotografías realizadas por Antonio Joaquín Mezcua Roelas